Caballeros 1

jueves, 31 de mayo de 2012

El Don Juan de Byron

Hasta la inocencia conoce el artificio, pues nunca se vale de la franqueza; el amor es quien enseña hipocresía a la juventud”.
“Dulce es ser despertado por el canto de la alondra y arrullado en nuestro sueño por el ruido de la cascada… Es dulce la vendimia cuando los racimos caen en desorden y profusión al suelo humedecido del purpúreo jugo; es dulce y alegre el campestre paseo que nos aparta del tráfago de la ciudad… La reconciliación es dulce, y a veces también una querella; es dulce salir contra el mundo entero en defensa de un desvalido, y más dulce todavía volver al asilo de la niñez, que nunca se olvida. Pero más dulce que todo esto, y más dulce que todas las dulzuras de este mundo, es el primer amor, la primera pasión”.
“Durante su primera pasión, la mujer ama al amante; en todas las demás, ama el Amor… Primeramente, un hombre sólo tiene el privilegio de conmover a la mujer; después, ya ésta prefiere al Hombre en plural, supuesto que la suma no le estorba” .
“La mujer difiere de sí misma cuanto el vino de una botella entera al de la misma comenzada. Me atrevo a creer, aunque no lo juro, que el vino y la mujer, mientras no envejecen, son de fácil adulteración”
“Nada lleva la calma a los ánimos temerosos mejor que el ron y la fe verdadera”.
“Podré quedarme solo, pero jamás cambiaré por un trono la libertad de mi pensamiento”.
“Flota la vida del hombre entre dos mundos, como una estrella en el horizonte entre el día y la noche. ¡Qué poco sabemos de lo que somos y menos todavía de lo que hemos de ser!. La eterna caarrera del tiempo se lleva nuestras frágiles existencias; una ola llama a otra ola en el espumoso océano de los siglos, mientras que de los sepulcros de los imperios levántase un monumento como se levantan sobre la llanura inmensa del mar las pasajeras olas”.
______________________________________________________________________________

No hay comentarios:

Publicar un comentario