Caballeros 1

martes, 2 de noviembre de 2021

EXPOSICIONES.


OLIVIA

 No es ya...

No es ya

esa

gravedad, cayendo

a veces contigo

en la hora.

Es otra.

Es el peso que retiene el vacío

que iría

contigo.

Como tú, no tiene nombre. Tal vez

seáis lo mismo. Tal vez

un día también tú me nombres

así.

De "La rosa de nadie" 1963

Versión de José Luis Reina Palazón

Obras completas - Editorial Trota 1999


ALBA

Había tierra en ellos...

Había tierra en ellos y

cavaban.


Cavaban y cavaban y pasaba así

el día y pasaba la noche. No alababan a Dios

que, según les dijeron, quería todo esto,

que, según les dijeron, sabía todo esto.


Cavaban y nada más oían;

y no se hicieron sabios ni inventaron un canto

ni imaginaron un lenguaje nuevo.

Cavaban.


Vino una calma y vino una tormenta

y todos los océanos vinieron.

Yo cavo y tú cavas e igual cava el gusano

y aquel remoto canto dice: cavan.


Oh uno, oh nadie, oh ninguno, oh tú:

¿Adónde iba si hacia nada iba?

Oh, tú cavas y yo cavo, yo me cavo hacia ti,

y en el dedo se nos despierta el anillo.

De La rosa de nadie, 1963. Versión de José Ángel Valente


BRITNNEY

Estaba...

Estaba
la pizzca de higo en tu labio,

estaba
Jerusalén a nuestro alrededor,

estaba
el aroma de los pinos albares
sobre el barco danés que regraciamos,

yo estaba en ti.


GABRIEL

En el venero de tus ojos viven las redes de los pescadores de la mar errabunda. En el venero de tus ojos el mar mantiene su promesa.

En ella arrojo yo, un corazón que entre los hombres ha morado, lejos de mí mis vestiduras y el resplandor de un juramento.

Más oscuro en lo oscuro, más desnudo estoy. Tan sólo al desertar soy fiel. Yo soy tú cuando soy yo.

En el venero de tus ojos derivo y sueño un rapto.

En una red, una red queda apresada y nos abandonamos enlazados.

En el venero de tus ojos estrangula su cuerda un ahorcado.


NOA

Había tierra en ellos...

Había tierra en ellos y
cavaban.

Cavaban y cavaban y pasaba así
el día y pasaba la noche. No alababan a Dios
que, según les dijeron, quería todo esto,
que, según les dijeron, sabía todo esto.

Cavaban y nada más oían;
y no se hicieron sabios ni inventaron un canto
ni imaginaron un lenguaje nuevo.
Cavaban.

Vino una calma y vino una tormenta
y todos los océanos vinieron.
Yo cavo y tú cavas e igual cava el gusano
y aquel remoto canto dice: cavan.

Oh uno, oh nadie, oh ninguno, oh tú:
¿Adónde iba si hacia nada iba?
Oh, tú cavas y yo cavo, yo me cavo hacia ti,
y en el dedo se nos despierta el anillo.

De "La rosa de nadie" 1963
Versión de José Ángel Valente

MAIKA

De viaje (Traducción: José Luis Reina Palazón)

Hay una hora que hace del polvo tu escolta,
de tu casa en París, lugar de sacrificio
de tus manos,
de tu ojo negro, el más negro ojo.

Hay una estancia donde un tiro de caballos
se detiene para tu corazón.
Tu cabello quisiera ondear en el viento
cuando te vas, eso le está prohibido.
Los que quedan y hacen signos de adiós
no lo saben.

LOLA

Cristal
No busques en mis labios tu boca,
ni en la puerta al extraño,
ni en el ojo la lágrima.
Siete noches más arriba
pasa el rojo hacia el púrpura,
siete corazones más adentro
insiste la mano en la puerta,
siete rosas más tarde
se escucha el rumor de la cisterna.
De "Amapola y memoria" 1952
Versión de José María Pérez Gay


ALEJANDRA.
con todos los pensamientos me fui...

Con todos los pensamientos me fui
fuera del mundo: allí estabas tú,
mi sosegada, mi abierta, y-
nos recibiste.

¿Quién
dice que se nos murió todo
cuando se nos quebraron los ojos?
Todo despertó, todo comenzó.

Grande vino un sol flotando, radiantes
se le enfrentaron alma y alma, claras,
imperiosas le presilenciaron
su órbita.

Suve
se abrió tu seno, silente
subió un aliento al éter,
y lo que se hizo nube ¿no era,
no era forma y a partir de nosotros,
no era
tanto así como un nombre?

De "La rosa de nadie" 1963
Versión de José Luis Reina Palazón
Obras completas - Editorial Trota 1999

No hay comentarios:

Publicar un comentario